Un arquitecto al que ya hemos mencionado varias veces, tanto en algunos artículos de PdS, como en publicaciones en las redes sociales durante el #JuevesDeArquitectura, será hoy nuestro Patio Personal.
El arquitecto portugués Álvaro Siza Vieira nace en Matosinhos (Portugal) en 1933, intenta ser escultor en sus primeros años, pero tras fascinarse con la arquitectura de Gaudí y comprender la arquitectura clásica romana, y por ciertas presiones familiares, decide embarcarse en el viaje de la Arquitectura.
Comienza su andadura profesional junto con Fernando Távora, quien delega en él en ciertas obras, como el restaurante en Leça de Palmeira, donde comienzan a verse ciertos aspectos característicos de Álvaro.
El interés por el lugar, por el entorno ocupado por una intervención tanto en el espacio como en el tiempo, de una forma naturalmente concebida, lo lleva a comprender la Arquitectura como una sucesión de tiempos y conocimientos, que se intersecan y dan lugar a espectaculares espacios al abrirse a este cúmulo de tiempos.
De este modo, su arquitectura tiende a consolidar e igualar estos estratos, descubriendo líneas y tensiones presentes en el mismo lugar a las que atiende el proyecto, descubriendo una arquitectura atemporal, presente en el lugar desde el inicio, que da respuestas a funciones presentes, pero también futuras y pasadas, desde un respeto mordaz.
El resultado en este Patio Personal es un estudio abierto, donde el conocimiento ha de fluir entre planos, dibujos, textos, que se superponen y se extralimitan del lugar en el están hacinados para asaltar otros espacios, buscando en la superposición de conocimientos la presencia de un proyecto a descubrir.