Conversación con Ele Arkitektura
Puntos comunes
Conversación con Ele Arkitektura
[patio] #01 ‘De vuelta’ ofrece un recorrido por la obra de Ele Arkitektura y la filosofía de este taller, junto con otros textos dedicados a BIZNA Estudio, AJO Taller u Ocamica Tudanca Arquitectos, componiendo un recorrido por la situación de los estudios de arquitectura jóvenes en España.
El estudio de Eduardo y Eloi Landia, hermanos y fundadores de Ele Arkitektura, se sitúa en una céntrica calle de Durango, pueblo vizcaíno. El pequeño local se abre completamente al exterior a través de una cristalera que cubre la fachada, dividida horizontalmente con listones de madera –tres hojas de cristal rescatadas de una antigua tienda del pueblo– dejando ver los helechos guarecidos tras el cristal, pugnando por recibir la luz solar, y el espacio de trabajo del equipo: una gran mesa central en planta baja y un altillo trasero –el gallinero– conectado mediante una escalera de caracol.
Conversando con Eloi y Eduardo en este espacio, observamos el ir y venir en la calle Kaleberria, unos sin prestar atención, otros ojeando con curiosidad, la mayoría saludando a los hermanos –amigos, vecinos, compañeros de colegio–. Este ventanal, siempre abierto e iluminado con el tono cálido de la madera, es una membrana bidireccional, vibrante, que retumba con el latir del pueblo, pero que emana incesantemente la filosofía del taller.
El trabajo del estudio es, en su gran mayoría, un trabajo local, volcado a los vecinos, colegios y comercios de la zona, y que cuenta con los profesionales del pueblo: carpinterías o constructoras a las que han visto trabajar durante años.
"Entendemos que la innovación viene al comprender profundamente cómo funcionan los sistemas tradicionales y darles una vuelta más para conseguir lo que buscamos."
Solvencia material
patio. En vuestra obra aparece un constante uso del detalle desnudo y expuesto, de una manera casi didáctica que muestra las decisiones constructivas y la manera de trabajar el material, y consiguiendo llegar a hacerlo protagonista.
Eduardo. Cuando nosotros comenzamos un proyecto, trabajamos con lo que conocemos, con los materiales locales, la forma de construir que podemos defender y entender. Cada línea que dibujamos tiene un peso y supone una decisión constructiva que al final hace que acabemos definiendo el detalle casi desde el anteproyecto.
Tal vez es una forma de proyectar muy constructiva, o hace que los proyectos nazcan condicionados, que no podamos proyectar a sentimiento, pero también produce proyectos solventes, no sólo económicamente, si no también constructivamente.
Entendemos que la innovación viene al comprender profundamente cómo funcionan los sistemas tradicionales y darles una vuelta más para conseguir lo que buscamos.
Eloi. Tal vez eso nos aleja de la tendencia actual de las redes sociales, de la geometría pura y limpia…
patio. De la filosofía de la imagen y el like.
Eduardo. Evidentemente eso está influido por nuestra formación y por nuestra forma de trabajar. Hemos coordinado a pie de obra la mayoría de nuestros proyectos, así que entendemos la complejidad real que implican las decisiones que tomamos sobre el plano, y el número de personas que intervienen, por lo que tendemos a una economía de medios y de sistemas.
Igualar, compartir, construir
patio. La imagen mental de un patio de colegio, en muchas ocasiones, queda inundada por espacios dedicados exclusivamente a juegos de pelota -fútbol, la mayoría de las veces-, apareciendo centralizado este deporte y resignando el resto de la actividad a los márgenes de la cancha.
Cuando nos acercamos al patio de la Escuela San Antonio no encontramos porterías, canastas, ni áreas federadamente delimitadas en el suelo. Las formas geométricas desnudas, como una infraestructura habitada por el juego, acompaña el acceso al patio hasta estallar en la parte trasera del recinto, donde la topografía artificial de la madera inunda el patio, generando una situación fractal, subdividida en multitud de escenas simultáneas.
Eduardo. Al equilibrar las actividades dentro de este espacio abierto, al no concederle un recinto definido y central a una actividad concreta, lo que conseguimos es una situación más igualitaria.
La intención es deszonificar, abstraer los elementos que aparecen en el espacio para que las niñas y niños desarrollen y muestren sus habilidades de maneras diferentes, usando el entorno como herramienta para investigar y relacionarse.
Eloi. Al equilibrar esta situación, hay ciertos estándares ‘de toda la vida’ que son desbancados: de repente, no es más popular el que mejor juega al fútbol, porque la chica que mejor juega al escondite, el que escala en las anillas o la que construye torres altísimas con bloques de madera están ocupando el mismo espacio, y tienen la misma importancia.
Además, este entorno abstracto consigue desvincular los juegos de roles de género, haciendo que se realicen actividades compartidas y divertidas, sin importar las características de cada uno.
Esto nos conecta directamente con la estrategia que seguimos en la Plaza El Sol. Sestao es uno de los municipios más afectados por la crisis de la siderurgia, con una de las tasas más altas de paro de Euskadi y donde conviven personas de diferentes razas y culturas en un entorno muy empobrecido. Desgraciadamente, también existen enfrentamientos y disputas diariamente entre estos grupos.
La Plaza el Sol es el centro neurálgico de este asentamiento, y un lugar de reunión que había quedado zonificado y dividido por las diferentes comunidades. A la hora de intervenir, nos encontramos con unas fronteras muy definidas.
Eduardo. Nos preguntaban directamente a quién le íbamos a poner los columpios.
Por eso la intención fue la de encontrar puntos comunes, desvinculados de razas o culturas, para conseguir una situación de colaboración e intercambio. Y la manera de conseguirlo fue la de cubrir la pista de frontón: una estructura metálica que alberga la actividad de la plaza, que no sólo está constituida por el juego como tal, sino que funciona como un punto de encuentro cubierto para conciertos, eventos, fiestas…
Eloi. Lo que intentamos conseguir es que al menos las nuevas generaciones, que se reunen allí cada día, desarrollen una identidad de barrio que no se encuentre ligada a una crisis ni a sus enfrentamientos o diferencias, y que genere un ánimo de cambio compartido.
Fot. de portada. Ikastola Kurutziaga, Durango – Ele Arkitektura. [patio]
[patio] #01 ‘De vuelta’ ofrece un recorrido por la obra de Ele Arkitektura y la filosofía de este taller, junto con otros textos dedicados a BIZNA Estudio, AJO Taller u Ocamica Tudanca Arquitectos, componiendo un recorrido por la situación de los estudios de arquitectura jóvenes en España.
Sobre Ele Arkitektura
Ele Arkitektura se funda en 2013 al unir sus fuerzas Eduardo Landia y Eloi Landia tras varias colaboraciones. El estudio nace con la vocación de tejer una red multidisciplinar de profesionales independientes, capaz de abordar proyectos de tipología y escala diversa aunando distintas disciplinas artísticas y técnicas
Destacan trabajos como el concurso internacional para el Puente Sarasola en San Sebastián junto con la ingeniería Silga (segundo premio), Viviendas Tuteladas en Otxandio, Bizkaia (segundo premio), Un refugio para Oteiza junto con el escultor Javi Elorriaga (primer premio), Colegio Territorial de Arquitectos de Valencia junto con los arquitectos Alex Etxeberria y Amelia Perea (primer premio. Obra seleccionada entre las mejores 20 obras de la Comunidad Valenciana entre 2015/2018), la Reforma integral del edificio de educación infantil de la Ikastola Kurutziaga junto al arquitecto Jesús Landia (primer premio. Obra finalista en los premios COAVN 2019), el concurso para la construcción de un ascensor y una escalera urbana en el Alto Horno de Bizkaia en Sestao junto a Alex Etxeberria (primer premio), la rehabilitación de la plaza El Sol y la cubrición del frontón en Sestao (primer premio concurso restringido). Ele Arkitektura también fue finalista en la edición del Premio Peña Ganchegui 2017 y mención especial en las ediciones de 2019 y 2021. Recientemente el estudio ha sido seleccionado en el Festival Arquia Próxima VIII (2022).
